Saúl Sanmiguel Ortiz: “Son muchos los involucrados en esta nueva tendencia de mercado”.

 Por Saúl Sanmiguel Ortiz*

Durante los últimos años ha venido creciendo el consumo de cafés diferenciados en taza por varias razones, una de ellas es la gran volatilidad de precios en la bolsa de Nueva York. Las bajas cotizaciones han hecho que los productores de cafés especiales, exportadores, importadores y la misma industria esté presta a pagar más por estos cafés finos, sacándolos de dichas volatilidades y pagando un precio mucho más apropiado.

Historia

Adicionalmente lo acompañan con una historia sobre los lugares donde son producidos esos cafés de especialidad, el compromiso de la familia detrás del producto y la trazabilidad una vez es comercializado.

Esfuerzo

Son muchos los involucrados en esta nueva tendencia de mercado. Si bien es cierto que, hasta ahora, digo hace unos 18 años, se empezó a reconocer este gran esfuerzo en toda la cadena. Tanto el productor, comercializador, exportador, importador, se lo han tomado muy en serio y esta tendencia ya llegó para quedarse. Incluso a pesar de las dificultades a causa de la pandemia y los problemas en las tiendas del mundo que se han especializado en ofrecer este tipo de cafés para el deleite del paladar de sus clientes que gustosos pagan por una buena taza de café.

Tendencia

Para ilustrar un ejemplo durante los últimos cinco años el precio del café en la bolsa de NY, que es el sitio donde se negocian los contratos de los cafés suaves arábigos, la media ha estado entre US$0.86 centavos de dólar por libra hasta US$1.72 centavos por libra, pero generalmente la tendencia de precio ha sido bajista.

Precio directo

En los contratos de cafés especiales, su negocio no tiene en cuenta la cotización en bolsa, sino que se pacta un precio directo con el importador, quien a través del exportador le traslada gran parte del beneficio de este precio al productor, una vez descontados sus gastos y su utilidad.

Fuera de bolsa

Estos precios fuera de bolsa pueden haber tenido un promedio de entre US$1.90 centavos de dólar por libra hasta US$2.80 centavos de dólar por libra, aquí no vamos a tener en cuenta los cafés de concurso que son negociados en subasta abierta y cuyos precios han sido extraordinarios.

Inmenso paso

Si bien es cierto la cantidad de cafés de especialidad vendidos son absolutamente bajos frente al gran volumen de los cafés certificados y estándar, ya es un inmenso paso para ir generando una tendencia de consumo. Pero sobre todo de justicia de la gran industria casi que obligada por el consumidor que exige cada vez más saber de dónde proviene el producto que está bebiendo y bajo qué condiciones ha sido adquirido a los productores. Debemos animarnos a continuar trabajando en esta dirección, solo así veremos un futuro más promisorio.

*Administrador de Empresas Universidad Surcolombiana. 21 años gerente de Cadefihuila.